REPOSAPIÉS OFICINA

Si quieres mejorar tu postura al trabajar delante del ordenador, los resposapiés de oficina pueden ayudarte a una mejor circulación de la sangre y a una mejor alineación de la espalda. ¡Descubre sus secretos!

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Reposapiés ergonómico

Si te preocupa tu higiene postural y quieres conseguir un reposapiés para escritorio con el que mejorar tu postura y aumentar la ergonomía de tu oficina, debes tener en cuenta cuáles son las características clave que debes buscar en un reposapiés:

Reposapiés regulable en altura

Fíjate en que el apoya pies que compres sea regulable en altura si quieres conseguir unos buenos resultados ergonómicos. Este factor es imprescindible especialmente entre personas que midan menos de 160 cm, pero si mides más de eso y estás entre dos modelos de reposapiés, uno con altura regulable y otra no, piensa en que, al poder regular la altura de este accesorio podrás usarlo en cualquier parte, incluidos mesas y mostradores altos, por lo que será un alzador de pies más polivalente y, aunque cambies de mesa, podrás seguir usándolo.

Reposapiés ajustable en inclinación

Poder inclinar el reposapiés hacia delante y hacia atrás es muy interesante, pues permite articular el pie y conseguir un poco de movimiento y dinamismo durante las horas de trabajo.

Por ello, los mejores reposapiés para oficina se pueden mover hacia delante y hacia atrás simplemente haciendo un poco de fuerza con los pies, por lo que cada poco rato se puede adaptar la postura.

Tamaño del mejor reposapiés oficina

Aunque los apoya pies para oficina no necesitan ser muy grandes, sí es cierto que es interesante que tengan unas dimensiones mínimas para tener espacio suficiente como para mover los pies un poco y colocarlos en una postura cómoda. Por ello, se recomienda que el tamaño mínimo de un buen reposapiés de despacho sea de 45 cm de ancho por 35 cm de profundo.

Soporte para pies oficina antideslizante

La correcta adherencia de este accesorio es vital para que funcione bien y de buenos resultados, pues al apoyar los pies sobre él es posible que se mueva si es muy liviano o no tiene un buen sistema de agarre al suelo. Por ello los mejores apoyapiés son robustos e incluyen en su base algo que los hace adherentes al suelo (sin dejar residuos, obviamente).

Y lo mismo ocurre con la parte superior de estos accesorios: deben estar fabricados en material no deslizante para que, aunque el usuario incline los pies, estos se mantengan sin esfuerzo en su sitio. En muchos casos están diseñados con un patrón de líneas o esferas que logran una correcta adherencia del pie al reposapiés para poder trabajar con comodidad.

Reposapiés escritorio: ¿para qué sirve?

¿Todo el mundo necesita un posapiés para oficina? Lo cierto es que no, pues todo depende de tu altura y de la altura de la mesa en que trabajes. El objetivo de los reposapiés de escritorio es que los pies no nos queden colgando ni cojan mala postura para llegar al suelo, pues esto suele derivar en malas posturas de espalda y en una mala circulación.

Por ello, cabe preguntarse, ¿quién necesita usar un apoya pies para oficina? Algunos expertos señalan que las personas que midan menos de 1,60 probablemente necesiten este tipo de accesorios, aunque todo dependerá de la altura de la mesa en la que vayas a trabajar.

Esta mesa de trabajo es una de las más vendidas en Amazon y mide 74 cm de alto. El estándar de altura suele estar por ahí, entre 72 y 74. Esta otra mesa, por ejemplo, mide 73,5 cm de alto , y esta otra con estantería incluida 72 cm. Esto implica que al sentarse, y teniendo en cuenta que los brazos deben poder apoyarse restos en la mesa sin problemas, lo habitual es que queden en torno a 40 o 50 cm entre el asiento y el suelo. Esta altura deberán salvarla las piernas del usuario y el resultado final debe ser que toda la planta quede apoyada firmemente en el suelo. Si no cumples este requisito, necesitas un reposapiés para mejorar tu postura y evitar comprometer la espalda.

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